sábado, 23 de enero de 2010

La imagen de la semana: Haití. Sueños Rotos



Con mi incursión en las oposiciones tengo muy cerca el diccionario y me ha dado por buscar el significado de la palabra miseria.
Dice así: 1. Desgracia, trabajo, infortunio//2. Estrechez, falta de lo necesario para el sustento o para otra cosa, pobreza extremada.
Resulta que los ciudadanos de Haití ya participaban de esta miseria mucho antes de esta catástrofe, entonces...¿seríamos capaces de definir con una sola palabra la situación por la que está pasando este pueblo? Dios...más de 100.000 muertos. Cuantos sueños rotos, cuánta devastación. Dolor, sangre, lágrimas, duelos, pobreza...  
Nosotros, los del otro lado del mundo, contemplamos las imágenes, y parece que estamos vacunados contra el dolor porque nos pilla de "muy lejos". 
Pero, ¿saben qué? que la palabra miseria tiene una tercera acepción: 3. Avaricia, mezquindad y demasiada parsimonia.
En esta parte occidental del mundo también somos unos miserables. De aquellos que viven en la pobreza a veces siento pena. De la realidad que me ha tocado vivir me da bastante verguenza. Nos quejamos constantemente por lo que "no tenemos", por lo que nos gustaría alcanzar, por no tener un coche más grande, por tener unos vaqueros de Zara en lugar de unos levi's, por tener un piso de dos habitaciones y no un chalé con piscina, por no poder ir de viaje a Nueva York, por ser mileuristas, etcétera, etcétera....etcétera.
Sin embargo parece que somos tan avariciosos y tan mezquinos (tal y como dice la definición), en definitiva tan miserables, que no somos capaces de valorar que cada noche dormimos bajo un techo, al calor no sólo de la calefacción o de buenas fundas nórdicas de plumas de oca. Tenemos el calor de nuestros familiares, de nuestros amigos, de nuestra gente. Poseemos mucho y siempre nos sentimos pobres. Qué pena, nuestra realidad también es para llorar...


Pincha aquí y reflexiona un poco. Hay gente pobre y pobre gente. ¿A qué saco perteneces? Haití. Sueños rotos


Ya que presumimos de ser tan solidarios vamos a demostrarlo. Todos podemos. Si cada español dona un euro la nación aportaría 40 millones de euros a esta causa. 


Puedes enviar tus aportaciones a la cuenta Ayuda Española de Emergencia en La Caixa con número 2100 2254 18 0200213776, gestionada por la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional.

miércoles, 20 de enero de 2010

Retratos "A mi manera"

En este apartado, que espero actualizar semanalmente, intentaré describir a modo de "retrato" a personas que formen parte de mi entorno. Lo haré desde un punto totalmente subjetivo, el mío. Espero que a nadie le moleste lo que yo pueda publicar aquí y, si es así que por favor me lo diga.
La persona que quiero que inaugure mi apartado es... FRIDA

Nombre: Frida
Descripción general: Esta sanluqueña de 26 años es una joven atractiva que se empeña en destacar sus encantos exteriores (que son muchos), y que a veces eclipsan todo lo que lleva guardado en su interior. De ella siempre digo que es como un baúl precioso, pero que esconde un gran tesoro dentro que pocos insisten en descubrir, incluso ella misma.

Me encanta porque…es auténtica. Tiene chispa, magia, es como una encantadora de serpientes, al principio parece que es mejor no fiarse de ella por las simples apariencias pero en cuanto empieza a tocar la flauta te hipnotiza con su desparpajo, su alegría, su generosidad, su portazo a los prejuicios y su disponibilidad,¡ah! y “no se le caen los anillos para nada”. Lo mismo te vende unos zapatos, que le da un fregado a la casa o hace de mamá por un rato.
Una cualidad...sabe escuchar. Hablamos de una virtud de las que pocos podemos presumir. Si se sienta contigo a charlar está cien por cien en la conversación. Nada de digresiones a otra parte de su mundo. Te escucha, te entiende, y siempre se interesa aún más haciéndote preguntas. Es un placer conversar con ella.
De ella he aprendido a...no dejarme llevar por las apariencias. Si lo hubiese hecho, tal vez no la hubiese conocido. A primera vista una mujer diría que es una creída que te mira raro. A partir del tercer vistazo te das cuenta de que simplemente es observadora. La primera impresión de un hombre (desde mi humilde punto de vista) puede ser "vaya tía más espectacular, será fácil conseguirla". Y os anuncio que esto no es así. Es un premio con un número difícil de acertar.
Un consejo...me gustaría que se volviese una persona más inquieta con ganas de hacer cosas que le ayuden a crecer personal y profesionalmente y que le hagan creer en sus posibilidades.
Tiene que mejorar...su inseguridad. A veces se deja llevar demasiado por las apariencias. Debe aprender a indagar en la gente y en ella misma.  A menudo intento convencerla para que se quiera un poco más. Solo dándose el valor que tiene conseguirá que alguien inteligente considere que lo que tiene a su lado es una joya (una turquesa, por cierto).

En el futuro me gustaría... que alguien la descubriera como Colón descubrió América, y que la trate como una princesa. Que la quieran mucho y la valoren. Tal vez así comprenderá que lo que tuvo algún día no merecía ni merece la pena.

Momentos vividos...últimamente me ha acompañado en muchos momentos. De los buenos destaco la sesión de fotos a la que pertenece la publicada. La noche se resumiría en muchas risas entre tangas, medias y corsés. De los malos la recuerdo a ella y a mi prima Rocío esperando mi llegada para darme un simple abrazo que me supo a gloria. Impagable. Gracias.











domingo, 17 de enero de 2010

¿Estamos todos locos?


Si Don Quijote estaba loco. Todos padecemos esa “enfermedad” y os lo voy a demostrar.
Alonso Quijano no era más que un hombre dedicado a la lectura de Libros de Caballería. Tanto le gustaba ese mundo que lo idealizó y lo creyó cierto. No le importaba lo que todos le trataban de decir. Su pobre escudero, Sancho, intentaba hacerle ver que esos gigantes no eran más que molinos de viento. Pero ¿significa eso que tenía síntomas de locura?¿No es exactamente los que nos pasa a todos con el amor?
Resulta que desde pequeños leemos sobre este sentimiento tan propio de la condición humana. Nos venden un amor ideal, romántico, lleno de detalles, inmortal…y creemos que es cierto!! Fijaos. Como Don Quijote con sus Libros de Caballerías!!Pero a eso hay que añadirle que en los tiempos que corren se suman la televisión y el cine. Con esas películas de amor para siempre, de sentimientos inquebrantables, de sexo de verdad, donde se combinan el amor y la pasión… Y ni hablemos de las telenovelas. Tópicos típicos, típicos tópicos.
Y…bueno, nosotros después de ver con tanta naturalidad lo bonita que resulta una relación, en la que además una sucesión de acontecimientos intenta impedir siempre que los enamorados estén juntos pero donde al final el amor triunfa sobre todas las cosas, pensamos, igual que don Quijote, que eso es lo que vamos a encontrar fuera. Y no. Os lo digo desde ya. Vamos a curarnos de esa locura, que el amor es otra cosa, y bien distinta por cierto. De hecho siempre hay un Sancho en nuestra vida que nos intenta poner los pies en la tierra cuando vemos sentimientos y hechos heroicos del amado, donde nos los hay.
En definitiva Don Quijote sólo era un inconformista de la vida. Un héroe que luchó hasta el final por sus ideales y por lo que creía real. Pero, saben qué es lo que me da pánico más que miedo? Que al final, el Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha muere decepcionado. El escepticismo le hace ver que su verdad no era cierta y que no era el mundo que quería. A final de sus días, se había curado de su "locura".
¿Qué ocurre entonces cuando descubres que el amor no tiene nada que ver con lo que tú crees, que te defraudan tanto que hasta deja de interesarte, que no merece la pena luchar contra viento y marea? ¿Acabas muriendo por dentro como lo hizo Alonso Quijano? ¿O al final acabas aceptando que es algo distinto a lo que tú has soñado y que quieres? No esperen respuesta a esto. No la tengo.