De mis clases de marketing en la Universidad siempre se me
quedó fijado en la memoria el concepto de valor y precio.
El precio es lo que cuesta, es cuestión de números
objetivos. Sin embargo, el término valor es mucho más subjetivo porque se
asocia a lo que te suma socialmente el producto: prestigio, clase, elegancia,
poder, clase social, etcétera… es lo que significa. No es lo mismo tener un Proche que un Skoda
Fabia…jilipolleces (hablando feo),
los dos me llevan y me traen.
Y toda esta reflexión me ha abordado porque
Angelina Jolie lleva un anillo de compromiso de 200.000 euros que ya los
quisiera para mí, para comprarme un hogar que a día de hoy es un lujo, y no
tener que donarle mi tranquilidad al banco.
Comentaba un amigo que si yo tuviese ese nivel de ingresos
pues probablemente no me compraría un anillo en el chino y…¡me ha entrado
miedo! ¿Sabes por qué? Porque a mí me aterra pensar en tener una vida tan vacía
que busque rellenarla con cosas materiales (y que conste soy viciosa confesa de
la ropa y los complementos)
¿No os ha pasado que os habéis sentido tristes y habéis ido
a comprar cosas? ¿Soluciona eso algo? Pues no, así no sientes ni satisfacción y
felicidad. Hemos perdido el norte de las cosas que verdaderamente importan,
ésas que llenan tu vida de momentos simples pero reconfortantes y
gratificantes.
Yo, que dedico parte de mi vida laboral al marketing, sé que
el valor de algo no está en lo que cuesta monetariamente ni en parecer, que vende más, sino en ser y sentir.
Se me viene a la cabeza un pequeño reloj en forma de colgante vintage y de caperucita roja, que me compraron
mis padres el otro día en la feria porque ando apretadilla con los gastos de la
mudanza y querían darme un capricho.
- ¿Valor? Cariño, amor, protección, respaldo, no marca la hora, marca un momento
- ¿Coste? Doce euros
- ¿Seré entonces más infeliz? ¿Vale menos el cariño de mis padres que el de los ricos?
No, no quiero ni la vida ni el dinero de Angelina Jolie, me
encanta la mía. Si alguna vez gano mucho dinero y mi novio del futuro me regala
un anillo así de caro (demasiado suponer, sí) por favor, pegadme un tirón de orejas.
Prefiero un anillo de plástico, en lo alto de una noria con
la compañía de las estrellas y un grito de amor en el cielo. Eso sí es para
siempre. No quiero olvidarme de que son los momentos y las cosas simples las
dejan grandes huellas en el corazón. De todo lo demás se puede prescindir.
Que el anillo valga 200.000 no quiere decir que no se lo haya dado en una noria acompañado de un grito de amor.Creo que una cosa no tiene porque excluir la otra.
ResponderEliminarVamos,yo sigo en mis trece,si ganara 30 millones de euros nose donde compraria las cosas del dia a dia pero el anillo de comprom de mi chica no lo compraba en los chinos.
Gracias por tu artículo.....
ResponderEliminarYa no sé que creer...., y menos del mundo de la mujer....., es cierto que no quisieras el dinero de la Joly?? Que miedo vivir una vida sin saber que quieren realmente las del sexo opuesto, porque yo pienso que sí muchas lo qerrían.
Te cuento una cosa. Realmente quieres eso?? Quieres un anillo de plástico y que te lo digan desde lo alto de una noria?? Te lo digo porque yo SI creo en eso...en la espontaneidad..., en el valor que le damos a las cosas no en su precio físico.....creo en los anillos de plásticos y en los detalles subliminales....creo en todo eso....incluso en los "te quieros" en un postics amarillos...pero créeme si te digo que hay mujeres que no creen en eso. Es más, a boca llena y asegurando decirlo en nombre de todas las mujeres....he oído que todas queréis un "pedrusco" que os encantan las joyas, que cuanto mas gorda mejor y que lo que importa es que os hagan sentir guapas.
Yo me quedé de piedra. Primero....por escuchar esas palabras de alguien que me importaba y que me demostraba cuan vacía era su alma para llenarla y satisfacerla de "pedruscos". Y lo siguiente era temor por creer en sus palabras pudieran ser ciertas y miedo por pensar...¿todas las mujeres quereis joyas?
¿Soy crítico? Pienso que todos deseariamos tener el dinero de la Joly....seguro en el fondo...., pero todos somos realistas y al final nos adaptamos a lo que tenemos. Eso no quita que las emociones o el valor sea mejor o peor. El valor de las cosas se las damos nosotros. Y por favor si no te satisface "un vacío" interior irte de compras...prueba otras cosas. Hay miles maneras de probar: pasear..., leer, tomar un café..., tomar fotos..., hablar con un desconocido, escaparte a una ciudad un dia cualquiera....,
Yo sí creo en los anillos de plásticos y en las mil maneras de demostrar "te quieros", en los detalles, en los esfuerzos, en las luchas, en la superación, al fin y al cabo ¿¿por qué representarlo en algo que valga 200mil€??
Me parece tan vacío y "fisico", tan artificial....ponerle precio a un sentimiento. Me da verguenza.
Ojalá haya mujeres todavía que le valgan más cosas que un trozo de metal de X quilates. Por qué encerrar sentimientos en algo tan inerte???
Gracias por tu artículo, un abrazo, joseluislluelma.
Tengo un amigo,al que la novia la ha dado una lista con los regalos que quiere para su cumpleaños y para los Reyes. Y por supuesto no quiere,sucedaneos de plastico,sino las cosas tal y cual las ha pedido.
ResponderEliminarPero por supuesto no se puede generalizar,tambien hay tios que si no reciben regalos se comportan como ñiños chicos.
Por supuesto,no podemos saber si a la Jolie este anillo o uno de plastico le producen el mismo efecto,pero¿Que tiene eso que ver?
Brad Pitt por decir"Hola,voy a tomarme un capucchino"ya ha ganado esos 200.000 dolares,y si va a comprarle un anillo a su esposa,ira a Rodeo Drive¿Para que va a ir al chino?¿Por que ella es una tia sencilla?Puede que el anillo no lo haya comprado ni el,o que ni siquiera sepa lo que cuesta.
Estamos dandole vueltas como pobres a un asunto de ricos,jeje.